En estos días, hemos tenido el privilegio de entrevistar a Mercedes Sanchis, Jefa de innovación, promoción de la Seguridad y Salud en el Trabajo del Instituto de Biomecánica de Valencia y nos ha explicado muy bien las claves para construir una cultura preventiva de seguridad y salud laboral.
1. ¿Cómo construir entre todos una cultura preventiva de seguridad y salud laboral?
Cuando hablamos de cultura preventiva en seguridad y salud en el trabajo nos referimos al conjunto de actitudes compartidas por los miembros de una empresa sobre la salud, los riesgos, los accidentes, las enfermedades y las medidas preventivas. Se entiende como una forma sostenida de ejercer la gestión y supervisión de la empresa. Esto es acorde con los valores de la salud y la seguridad. A su vez que genere un clima favorecedor del comportamiento preventivo de los individuos de la organización, reconociendo los éxitos y aprendiendo de los errores.
A la hora de crear cultura preventiva en la empresa hay dos elementos fundamentales: el compromiso de la empresa y la participación de los trabajadores. Es imprescindible generar un cambio para que la forma de actuar en el trabajo sea diferente. Por lo que es importante, crear conciencia, adoptar nuevas conductas y una actitud responsable y de respeto por la protección de la salud y el entorno.
Para lograr construir una cultura de seguridad y salud en el trabajo es necesario:
- Una visión de la gerencia comprometida y participativa en PRL.
- Generar confianza con los trabajadores, ya que son el principal valor de la empresa.
- Se debe contar con un clima laboral que fomenta la aceptación, la participación, la resolución constructiva de los problemas.
- Debe existir reconocimiento de la alta gerencia hacia los trabajadores/as que respetan las normas de seguridad.
- Otorgar los recursos necesarios (económicos, técnicos, humanos).
- Los trabajadores/as deben participar de alguna manera en la toma de decisiones de la seguridad y salud.
- Los delegados/as de prevención de riesgos de la empresa deben ser facilitadores, comprometidos y proactivos.
Con todo esto se logra que las personas trabajadoras se sientan parte importante de la organización.
Para lograr un cambio positivo en la cultura de la organización es primordial la transformación de conductas de todos los integrantes.
Según insiste la OIT, “en un lugar de trabajo con una cultura de salud y seguridad en el trabajo sólida, los trabajadores se sienten cómodos planteando sus preocupaciones sobre posibles riesgos o peligros para la salud y seguridad en el lugar de trabajo”…
2. ¿Qué acciones podrían realizar las empresas para prevenir los riesgos laborales más frecuentes hoy en día, aumentando la productividad y la calidad de vida de sus empleados?
En el caso de los trastornos musculoesqueléticos (que es el tema que se trabaja desde el Instituto de Biomecánica de Valencia principalmente), se deben llevar a cabo acciones enfocadas a:
- Trabajar en el diseño de puestos de trabajo y procesos considerando aspectos ergonómicos. Cuando hablamos de diseño del puesto de trabajo nos referimos no solo al puesto físico, sino a todas las tareas que una persona debe realizar durante su jornada laboral. Esto tiene implicación tanto en el diseño del puesto físico como en los procesos productivos.
- Integrar el enfoque de género y edad en el diseño de puestos de trabajo. Las personas somos diversas y nuestras capacidades también, las cuales además van cambiando dependiendo de la etapa de nuestra vida en la que nos encontremos. Es necesario intentar que haya el mayor ajuste posible entre las demandas del puesto de trabajo y las capacidades de las personas.
- Contar con el personal a la hora de tomar decisiones sobre aspectos relacionados con su seguridad y salud en el puesto.
- Trabajar en la prevención y en la promoción de la salud en el trabajo, fomentando en la medida de lo posible hábitos de vida saludables.
4. Cambios y tendencias en salud y seguridad laboral. ¿Puedes comentarnos al respecto?
Según estudios, alrededor del 75% de los niños que ahora tienen menos de 5 años realizarán trabajos que ahora desconocemos, seguro que aparecerán tendencias de seguridad y salud laboral que cubran las necesidades de estos nuevos trabajos.
Pero sin irnos tan lejos, ya estamos viviendo cambios y nuevas tendencias en la seguridad y salud principalmente con la incorporación de nuevas tecnologías.
Por citar algunos ejemplos:
- Uso de la Inteligencia Artificial para comprobar el uso adecuado de las EPIs.
- Inteligencia Artificial aplicada a la evaluación de riesgos ergonómicos, que supone un ahorro en tiempo de hasta un 70% a los profesionales.
- Uso de Realidad Virtual o Realidad Aumentada en formación, transmitiendo conocimientos a las personas trabajadoras de manera dinámica, sin que exista realmente exposición a ese riesgo.
- Uso de exoesqueletos en los puestos de trabajo, cada vez más utilizados en algunos sectores.
- Robots colaborativos, que permiten liberar a las personas trabajadoras de realizar las tareas más penosas o lesivas de su puesto de trabajo.
- Sensores integrados en la ropa de trabajo que permite a las personas trabajadoras contar con información en tiempo real sobre su posible exposición a riesgos ergonómicos.
- Desde el Instituto de Biomecánica de Valencia hemos empezado a trabajar en el desarrollo de un Gemelo Digital de las personas trabajadoras. El objetivo es que las organizaciones puedan prever situaciones de TMEs considerando información relativa a la persona trabajadora.
Sin duda, estamos viviendo una auténtica revolución tanto en el mundo laboral como en el tecnológico, por lo que debemos verlo como una oportunidad para mejorar la calidad de vida de las personas trabajadoras. Y esto pasa tanto por la prevención de su seguridad y salud como por ofrecerles la posibilidad de realizar tareas que aporten valor añadido y que sea la tecnología, la que realice las tareas que aporten un menor valor.